Hace 80 años, un sábado, 28 de junio de 1941, hacia su debut escénico de la mano del tenor cómico Antonio Palacios, Rosita Fornés.

La obra seleccionada para este debut seria "El asombro de Damasco", zarzuela española con música del maestro Pablo Luna y textos de Antonio Paso Cano y Joaquín Abati y el escenario, el desaparecido Teatro Principal de La Comedia, sito en Animas entre Prado y Zulueta, frente al hoy remozado y legendario Sloppy Joe's Bar.

Rosita Fornés recuerda:

Debuté con Antonio Palacios, ese grande de las tablas españolas que tanto hizo por Cuba. Yo le llamo mi padre artístico, y lo recordaré siempre porque con él aprendí casi todo lo que sé de ese mundo tan complejo y bello que nace y muere tras los telones.

»En 1941 Antonio Palacios organizó una temporada corta de zarzuelas en el Teatro de la Comedia, que estaba situado en el Paseo del Prado. Era un local fabuloso, con una acústica increíble, porque en aquella época no se cantaba con micrófono sino a viva voz. Le decían La Bombonera por lo hermoso de su arquitectura. Un día sus dueños lo derrumbaron para construir un edificio alto, pero no hicieron nada, y al final se perdió un gran teatro.

»En junio del cuarenta y uno, en La Bombonera, debuté como profesional interpretando El asombro de Damasco, una obra dirigida por Antonio Palacios.

Esa misma noche, al caer el telón, se me acercó un señor con las manos extendidas y me dijo: «Magnífico, lo ha hecho usted muy bien... Mucho gusto en conocerla... Ernesto Lecuona, para servirle.»...


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--- Ese es mi padre artístico... Un día se me presentó solo.

--- Perdóname, dijo, que te interrumpa, estaba esperando que terminaras de ensayar. Yo soy Antonio Palacios, te he observado y me gusta mucho como tu cantas. Te gustaría cantar una zarzuela o una opereta. Enseguida le contesté que sí, toda la vida he sido audaz.

Recuerdo que Palacios me dice --- Estoy haciendo una temporadita corta en el Teatro La Comedia y quisiera que me hicieras El asombro de Damasco.

Respondí --- si usted cree que yo lo puedo hacer, yo lo hago. Me lo montó y debuté con Miguel de Grandy y Pedrito Fernández que sabían mucho de ese género.

Y agregaba Rosita--- Antonio Palacios tenía un elenco muy bueno formado. Ahí es donde empiezo a hacer género de zarzuela y de opereta.---

Sirva esta Efemérides para rendir un merecido tributo a la intuición y buen ojo de este gran actor y tenor. Para rememorar con imágenes, uno de los teatros mas importantes de la primera mitad del siglo XX. Y para festejar, modestamente, el comienzo de una trayectoria escénica singular.

Nunca en mejor ocasión, citar esta frase del escritor Miguel Barnet:

Si las butacas de todos los teatros de Cuba
tuvieran que gritar un nombre,
ese seria el de
ROSITA FORNÉS

¡Gracias Rosita, por tu imperecedero legado!